Durante los procesos de transformación socio-políticos acontecidos en Chile a partir de 1973, los modelos de ideologización, control violento y dirección de la construcción de identidades nacionales, buscaron legitimidad a través de prácticas discursivas, a modo de interferir los espacios de socialización desde el Estado, a través de la “Historia Patria” enarbolada como proyecto de unidad nacional por la dictadura militar.
La revisión y análisis de las transformaciones en la enseñanza de la historia, será el mecanismo de observación de estas prácticas de irrupción discursiva, proceso de selección que Ranahil Guha ha llamado: Estatismo.
A través del Análisis Crítico de Discurso (ACD) sobre textos escolares, libros de apoyo y revisión de archivo gubernamental, podemos observar las repercusión de la relación entre discurso y poder, y su interferencia en el espacio educativos a través de; símbolos, héroes, ritos y alabanzas, fundando una idea de nación construida desde el Estado. El traspaso generacional de estas prácticas discursivas, invita a revisar sus alcances más allá de sus procesos de elaboración y ocupación de un espacio público, coartado por la dictadura, y sus implicancias en la construcción de una idea de nación en Chile.
Palabras claves: Identidad, nación, violencia, legitimidad, historia.
Autores: aliaga, Pauline (UNAM, Mexico / Mexiko)